
Con la campaña de aceituna 2023/2024 en su fase decisiva, los distintos eslabones de la cadena de producción y comercialización comienzan a mover fichas. Los precios en origen continúan muy altos, sin síntomas de decaer, el rendimiento industrial graso sube pero lentamente y las grandes envasadoras doblan su apuesta para asegurarse producto no solo para abastecer el mercado español sino también el de exportación, siempre con márgenes más altos.
De la segunda a la tercera semana de diciembre, grandes envasadoras a través de sus filiales agrarias y de compra de aceitunas, han aumentado más de un 18% de media el precio que pagan por la aceituna en sus puestos de intermediarios. De pagar en muchas zonas de Andalucía y Extremadura a medias de un euro más IVA el kilo -salvando el caso de la Manzanilla Cacereña y otras variedades de menor rendimiento- han comenzado a pagar a 1,18 más IVA de media. Por la mejora del rendimiento más IVA pero también por la apertura ya masiva de las cooperativas, que hasta la segunda semana de diciembre han estado más remisas que otros años en espera de mejores precios para sus productores.
En el caso de las cooperativas que no cuentan con almazara propia, que aún quedan más de lo que parece en España, han tenido que enfrentarse en los últimos días a una compleja coyuntura ante sus socios. Si elegir molturar en una almazara a maquila el aceite y esperar la evolución de los precios para venderlo en el mercado, comenzando así la almazara sin precio fijo para la aceituna. O comenzar a recogerla sin un rendimiento que garantizara un precio suficiente a las expectativas creadas viendo los precios en origen.
Resulta curioso como en los años en los que estamos, que muchos socios de cooperativas solo sigan pensando en el rendimiento industrial a la hora de entregar la aceituna sin pensar también en otros parámetros, con la acidez en cabeza, que son claves en la calidad y durabilidad del aceite y por tanto en el precio en origen del mismo. La escasa diferencia de precios en origen entre el virgen extra/ virgen y los lampantes, ante la baja disponibilidad de aceites en el mercado tras una segunda campaña corta, explica en parte también esta situación.
Habrá que ver las cifras del mes de diciembre facilitadas por AICA para comprobar, ya con tres meses de campaña, si las previsiones de los aforos se acercan a la realidad o quedan desfasadas por el menor rendimiento esperado.