Desde su constitución en mayo de 2015, la Interprofesional del Aceite de Orujo de Oliva (ORIVA) se ha posicionado como un referente en la promoción y consolidación de este producto genuino del olivar español que, pese a su arraigada tradición, sigue siendo poco conocido por el gran público. Durante estos diez años, la Interprofesional ha demostrado un firme compromiso con la investigación, el desarrollo y la innovación, orientando sus esfuerzos hacia la detección, fundamentación y divulgación de los múltiples beneficios de este aceite.
La apuesta decidida por la investigación científica constituye uno de los pilares esenciales de ORIVA. En este sentido, ORIVA colabora con el Instituto de la Grasa (IG) y el Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN), centros de investigación pertenecientes al prestigioso Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Esta alianza ha permitido el desarrollo de proyectos de investigación centrados en dos líneas estratégicas fundamentales: el potencial saludable y las ventajas culinarias del Aceite de Orujo de Oliva. La sinergia entre estos centros y ORIVA no solo tiene como objetivo derribar los mitos y desinformaciones que han rodeado históricamente al producto, sino también robustecer su perfil mediante datos y análisis científicos de alto rigor, combinando la tradición del olivar español con los avances tecnológicos modernos.
A lo largo de estos años, ORIVA ha promovido estudios científicos de alto nivel, plasmados en publicaciones especializadas, que avalan una extensa variedad de beneficios del Aceite de Orujo de Oliva. Estas investigaciones han aportado información clave sobre sus características multifuncionales, revelando su estabilidad a altas temperaturas durante procesos de fritura, lo que lo convierte en un ingrediente ideal para diversas aplicaciones culinarias. Además, se ha evidenciado su capacidad para integrarse en múltiples recetas, aportando propiedades nutricionales relevantes, como su contenido en compuestos bioactivos, la mejora del perfil lipídico y su resistencia a la degradación oxidativa en frituras y horneados.
Actualmente, ORIVA mantiene activas varias líneas de investigación que siguen ampliando el conocimiento sobre el potencial del Aceite de Orujo de Oliva. La más veterana, en desarrollo desde 2017, estudia el papel de sus componentes minoritarios en la prevención del Alzheimer. Otra línea, centrada en el eritrodiol -un alcohol triterpénico presente en el aceite-, analiza su efecto en la mejora de parámetros asociados al síndrome metabólico. Además, se está evaluando su posible acción antidiabética a través de la modulación de la microbiota intestinal. Estas investigaciones reafirman el compromiso de ORIVA con la ciencia como vía para posicionar el Aceite de Orujo de Oliva como un alimento de calidad, saludable y plenamente alineado con los retos actuales de la nutrición.
La apuesta de ORIVA por la investigación, el desarrollo y la innovación en torno al Aceite de Orujo de Oliva está consiguiendo derribar percepciones erróneas sostenidas sobre este producto en el pasado, así como reconfigurar el panorama de la valorización del Aceite de Orujo de Oliva, posicionándolo como una opción sólida y diferenciada en el mercado global. El conocimiento científico de vanguardia respalda cada uno de estos estudios, ofreciendo a productores y consumidores la certeza de que el Aceite de Orujo de Oliva es uno de los mejores aceites del mundo.
Revista Almaceite 