
La llegada al mercado español de aceite de oliva virgen extra y aceite de oliva refinado mezclado con aceite de girasol en los últimos días en grandes grupos de distribución como el andaluz MAS y el vasco Eroski ha causado un importante revuelo en el sector. Un producto que se puede vender legalmente en España siempre que esté fabricado en otro país que permita su elaboración, ya que en España sólo está permitida su fabricación para su exportación.
El aceite en cuestión se ha vendido bajo la marca La Andaluza, propiedad del grupo sevillano Acesur. Se trata de aceite elaborado con aceite de oliva virgen extra Picual en un 35%, un 25% de oliva refinado, un 20% de girasol alto oléico y un 20% de girasol refinado. El aceite está envasado en Portugal, cuya legislación sí lo permite.
Dos grupos de distribución han estado comercializándolo: el sevillano Grupo MAS, que cuenta con más de 100 tiendas de su enseña principal entre Sevilla, Huelva, Málaga, Granada y Cádiz. Y el vasco Eroski, uno de los gigantes nacionales con gran presencia en País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia. El aceite se ha estado vendiendo en garrafas de cinco litros a 19,95 euros y en botella de litro a 4,19 euros. En las mismas tiendas on line donde se han estado vendiendo, el precio medio de la garrafa de cinco litros de virgen extra era de 29,45 euros, es decir unos diez euros más que el de la mezcla de aceites de oliva y girasol. En esas mismas webs se ofertaba el aceite de oliva refinado a 5 euros el litro y el girasol a 1,85 euros el litro.
La organización de productores UPA fue la primera en criticar la comercialización de estos aceites, a los que se sumaron distintas cooperativas productoras. El tema llegó a la portada de medios nacionales. UPA llegó a afirmar en un comunicado que “entramos en un escenario de impredecibles consecuencias para el conjunto del sector. Introducir en el mercado español un nuevo blend de aceites elaborado a base de mezclas de aceites de diverso origen deteriora de forma indigna la imagen y el amparo de un producto de excelencia como es nuestro aceite de oliva, debe pararse de inmediato”.
La oposición del sector productor provocó una reunión de urgencia en la sede de Cooperativas Agroalimentarias en Madrid el pasado miércoles 3 de mayo, con la presencia de todo el sector: Anierac, cuyo presidente Gonzalo Guillén es a su vez director general de Acesur; Asoliva: Infaoliva; Cooperativas Agroalimentarias de España y las organizaciones agrarias.
Durante dicha reunión, ante las peticiones del sector productor y cooperativo, el director de Acesur aseguró, según varias fuentes consultadas por www.revistaalmaceite.com que asistieron a dicha reunión, que su grupo dejará de distribuir dicha marca con aceites de oliva mezclado con aceites de girasol. Un día después de la reunión, la tienda on line de Supermercados MAS dejó de ofrecer dicho producto. “Desde el sector productor -aseguran desde UPA Andalucía- no podíamos dejar que dicha estrategia se ampliará a otras grandes envasadoras ni grandes cadenas de distribución porque no sería bueno para el sector ni la imagen en el producto”.
«Cooperativas Agro-alimentarias ha estado siempre en contra de la comercialización de mezclas de aceite de girasol o de cualquier otro, con Aceite de Oliva -asegura Antonio Guzmán, gerente de Cooperativas Agro-alimentarias de Jaén. «Por un lado porque generaría confusión en el consumidor, dado que éste posiciona al Aceite de Oliva de una forma única, además de que el etiquetaje es como mínimo, impreciso; y por otro, sería una puerta abierta al fraude, ya que con los métodos analíticos de control, no hay garantías de que los envases contengan realmente los porcentajes que se recogen en el etiquetado, necesitándose, además, muchísimos controles para verificar que lo que contiene el envase cumple con lo que se establece en la etiqueta y con los requisitos de la normativa comunitaria vigente. Todo esto podría causar un daño y desconfianza enormes no solo al Aceite de Oliva, y en particular al Virgen y Virgen Extra, prestigiado como producto de calidad, natural y saludable, sino al sector del olivar, con los efectos perversos que ello conlleva para la provincia de Jaén, cuya fuente de riqueza y vida es su bosque de olivar y su Aceite de Oliva».
La comercialización de aceites de oliva mezclados con aceites de girasol sigue produciéndose en el mercado español a través de internet, con marcas menos conocidas elaboradas fuera de nuestro país y en tiendas de menor alcance. Con marcas que habitualmente incorporan un porcentaje de aceites de girasol entre el 70 y el 80%. Una de las más activas on line es la marca “Gidolive”, con un 30% de aceite de oliva virgen extra y un 70% de girasol, a través de Onacook, una empresa gastronómica francesa de la localidad de Urrugne, cercana a San Juan de Luz, muy activa en el mercado del País Vasco. Vende su litro de “Gidolive” a 8,56 euros/litro. Otras marcas que han estado presentes en los últimos tiempos on line, pero en el mercado de Estados Unidos, han sido Iberia Foods de Nueva York y “Palermo”.