Olivar de Castro da un paso más en la innovación con el aceite de oliva. En los últimos meses han estado desarrollando para la empresa “Érase un gourmet” varios productos conjugando la sidra asturiana y el aceite de oliva virgen extra de Jaén. “Érase un gourmet” tiene su sede en Gijón. Su gerente Sandra Ovies nos habla de este proyecto:
“Los productos que han sido creados por Olivar de Castro, para la Marca Érase un Gourmet con la chef Lara Roguez, son unos productos donde hemos querido unir lo diferente con la exquisitez culinaria. Son productos diferentes que gracias a Olivar de Castro han podido ver la luz y lanzarse al mercado.
Estamos sumamente agradecidas a Olivar de Castro por saber captar también la idea que queríamos y darle forma en nuestros productos, han sabido hacer unos productos innovadores pero que tienen todo el sabor de los productos artesanales y naturales; sin lugar a duda Olivar de Castro y “Érase un Gourmet” van de la mano, y no sería posible poner en el mercado estos productos sin ellos.
Dada la naturaleza de los productos, están teniendo una buena aceptación en el mercado. Son productos, naturales, sanos, aptos para veganos y no contienen gluten, valores en alza en los nuevos consumidores.
El artífice de esta unión ha sido Inmaculada Pineda “Con gusto y sabor” que nos puso en contacto a ambas empresas. Entre los productos que nos han desarrollado están la sal de sidra, sal de aceite, un vinagre aromatizado con fresa y lavanda y un aliño donde el principal ingrediente es el aceite de oliva junto a la sidra asturiana, y por supuesto la mermelada y emulsiones de aceite de oliva que ya son un referente en Olivar de Castro.
Para Olivar de Castro supone un paso más en el desarrollo de nuevos productos dando otra manera de utilizar el aceite de oliva. Su gerente Víctor Delgado comenta la gran satisfacción que siente cada vez que crean un nuevo producto y sobre todo la gratificación que supone la confianza que se deposita en ellos. “Es un éxito compartido”.
Revista Almaceite 