Una buena parte de las 1.783 almazaras existentes en España abren muy pocos días al año. Para molturar sus propias aceitunas o en muchos casos para producir aceite para terceros o a maquila. Y a veces para producir poco aceite.
Las diferencias de molturación de aceituna y producción de aceite entre las almazaras andaluzas y las del resto de España pueden llegar a ser abismal. De hecho hay pueblos jiennense que llegan a producir en una campaña lo que todas las almazaras de algunas provincias españolas en conjunto. Por ejemplo, una almazara de Jaén produjo de media la pasada campaña 2015/2016 casi nueve veces más aceite que una de Cáceres, Tarragona o Teruel.
Si tenemos en cuenta que en Andalucía las 828 almazaras existentes produjeron 1,11 millones de toneladas de aceite, la media se alcanza las 1.340 toneladas. Que sube hasta las 1.612 en el caso de las almazaras de Jaén y las 1.496 en las de Córdoba. En toda España, la media de las 1783 almazaras operativas sería de 782 toneladas.
En el caso de otras regiones muy productoras como Castilla-La Mancha o Extremadura, hay provincias como Ciudad Real (637 tn) y Badajoz (46) que sí se acercan a la media española, y otras como Toledo (394 tn) o Cáceres (185 tn) que quedan bastante alejadas. Lo mismo sucede en Cataluña, donde cada almazara de Tarragona produce 155 toneladas y las de Lleida 142, o las de Castellón con poco más de 218 toneladas.
Como se ve, cada almazara y cada olivar es un mundo.