Entrevista con
Dina Lopes
Responsable de proyectos estratégicos de Consulai
El Lago de Alqueva, a orillas del Guadiana fronterizo entre España y Portugal, pasa por ser el mayor embalse de la Unión Europea, con 250 kilómetros cuadrados de extensión, creando miles de hectáreas de nuevos regadíos. Los empresarios españoles están siendo muy activos en su desarrollo, especialmente en el olivar, la fruta y los frutos secos. Consulai, con sede en Lisboa y Beja, es una de las mayores consultoras especializadas en el sector agroalimentario, agrario y forestal de Portugal, pieza clave en el programa Agrifood/Invest en Portugal llevado a cabo por el Gobierno luso para atraer inversores.
¿En qué consiste el proyecto Agrifood que está desarrollando Portugal?
El proyecto Agrifood/Invest in Portugal consiste en captar inversores extranjeros para el sector agrícola y agroindustrial de Portugal, principalmente en la zona de Alqueva aunque no es exclusiva. Hay otras regiones con posibilidades también dependiendo sobre todo del tipo de cultivos que se quieran llevar a cabo.
En el caso de Alqueva y sus zonas de regadío ¿cuáles son los principales cultivos que se están plantando?
En la zona de Alqueva sobre todo destaca el olivar intensivo y superintensivo, gracias sobre todo a las infraestructuras de riego existentes. Actualmente hay 120.000 hectáreas de riego, más otras 45.000 hectáreas en desarrollo para futuros regadíos. Y hay muchas posibilidades con diferentes tipos de fincas y tipos de suelos: para olivar, para almendro que también esté creciendo mucho; frutales de hueso; uva de mesa y uva para vino. Y también en vegetales y algo de frutos rojos. La principal zona producción de frutos rojos está en el litoral, cerca de Odemira. Van a organizar una misión inversa para llevar inversores españoles, franceses y alemanes a la zona de Beja y Odemira.
¿Los inversores y empresarios españolas siguen teniendo gran interés en estos nuevos regadíos de Alqueva?
Consulai ha trabajado y trabaja con muchas empresas españolas desde hace tiempo. Sobre todo de Extremadura, la mayoría, y también andaluzas. La disponibilidad de agua se valora mucho entre los productores andaluces, muy preocupados por las restricciones del uso de agua. Y cada vez más con instalaciones a pie de campo como almazaras en el olivar o centrales de frío en la fruta de hueso.
Para los inversores que estén interesados en buscar fincas en la zona ¿cómo deben hacerlo?
Existe un catastro de fincas, gestionado por EDIA (Empresa de Desenvolvimento e Infra-Estruturas do Alqueva, S.A.), que permite ver las opciones existentes. Nosotros como empresa consultora ayudamos al productor e inversor a elegir la mejor opción para el tipo de cultivo que quiera llevar a cabo y después para realizar el Business Plan del mismo. Y todos los proyectos necesarios para tramitar ayudas y subvenciones, que son mayores que las que existen en otros países europeos. Es EDIA quien sabe si las fincas disponibles están en venta o son para arrendamiento.
¿Los precios medios por hectárea son más caros o baratos que en el regadío español?
Para venta, el precio medio estaría rondando los 15.000 a 18000 euros por hectárea de regadío. No son valores exactos ya que depende del tipo de finca, suelo, extensión, ubicación, etc. Una gran ventaja frente a España es el precio del agua. Alqueva tiene agua asegurada para cuatro años en sequía gracias a su gran embalse e infraestructuras. Hay un precio diferente si el riego es por presión o sin presión. El primer año no se paga y después se comienza por pagar el 30%, que va subiendo año a año hasta que el octavo año su precio es de 0,09 céntimos por metro cúbico, con intención de bajarlo aún más. Mucho más barato de otras zonas españolas de regadío como Almería, con precios de hasta 0,18 céntimos por metro cúbico.
¿Y el precio de la energía?
En Portugal la energía no es barata. Quizá algo más baja que en España pero no hay grandes diferencias. La mayor ventaja es el precio y disponibilidad de agua, y también, aún, el precio de la tierra. Y la disponibilidad de importantes extensiones gracias a la expansión de regadío.